Mi Manual de Instrucciones.

Hay cosas que tienen muy poco que ver con el dinero pero que son mucho más importantes que el dinero mismo.

Estoy corriendo el riesgo de ser demasiado transparente revelando esto pero creo que es peor si no lo revelo.

El dinero no es lo menos importante al momento de hacer una negociación conmigo. Lo dije.

Cuando cotizo un trabajo le doy el valor que lleva. No inflo los precios y hasta me he dado cuenta que cobro con las mismas tarifas y criterios que utilizaba hace más de diez años

Lo que si es importante para mi es la comunicación correcta y reconocer que trato con una persona seria.

Cuando eres un nuevo cliente, con el que nunca antes he trabajado, el que tengas todas las intenciones de pagarme lo justo y a tiempo no sirve de nada cuando es evidente todo lo contrario.

He tenido clientes en el pasado a los que por experiencia y conociéndolos de hace mucho tiempo, les otorgo el beneficio de la confianza y no les toco el tema del pago mas que una sola vez.

No me gusta involucrarme en un proceso creativo mientras tengo la duda y la preocupación de que estoy tratando con uno de esas pobres personas que solo tienen su valor en el bolsillo y nada mas.

Mi divisas son la decencia, el respeto, la cortesía y la buena comunicación. El dinero es solo consecuencia lógica de eso.

Cuando falta alguno de esos elementos no siento que el trabajo va en buen camino.

Yo siempre me comprometo a ofrecer un trabajo de calidad y entregarlo a tiempo. Por eso invierto en equipos y procesos para cumplir con la fecha deseada. Cuando no puedo cumplir con eso prefiero no aceptar el encargo. Nunca me he ganado un centavo a base de “matar” un trabajo.

Ahora bien, si el potencial cliente no cumple con las condiciones (como en un caso reciente) yo lo que hago, dada la prisa del trabajo, es ser flexible. Muy a pesar de lo que la experiencia me ha obligado a establecer como reglas, he sabido doblarlas para poder cumplir.

Vengo del mundo alocado de las publicitarias, comprendo los cambios en la marcha que aparecen, pero cuando un cliente al que no conozco, que no cumple con las condiciones y que tarda en darte respuestas y evade el muy importante tema del pago (como en un caso reciente) y además altera el trabajo final solicitando alteraciones que no me corresponde hacer y que no fueron contempladas en revisiones anteriores….lo más lógico del mundo es hacer un stop y aclarar las cosas.

Aclarar las cosas es montarse en un taxi express hacia la paz y el entendimiento.

Pero cuando hasta aclarar las cosas solo trae como resultado comentarios insolentes, palabras derogatorias y una actitud arrogante de parte de quien no ha cumplido con las condiciones de trabajo y aun así has invertido tiempo y esfuerzo en crear el mejor trabajo posible sin ningún tipo de garantía ni señal clara de respeto o intención de conciliar (como en el mismo caso reciente) uno solo debe admitir que estas tratando con gente que no merecía tu atención ni mucho menos una sola linea de mi lápiz.

Los que me conocen saben que nunca me ha gustado llevarme mal con nadie, pero eso no quiere decir que me siento cómodo siendo pisoteado, o tratado como un peón.

Prefiero tener amigos que tener clientes. Con los amigos se logran grandes cosas juntos y la sola sensación de que trato con personas que valoran mi tiempo, mis habilidades (no voy a decir “talento” porque esto lo digo con mucha humildad) y que sobre todo saben que mi trabajo es lo único que se hacer para vivir. No se engañar ni creo que el dinero sea razón suficiente para maltratar a nadie. Nunca exijo mas de lo que estoy dispuesto a dar.

Mi dignidad no esta en venta y me siento muy triste cuando trato con personas tan arrogantes que no se toman ni un minuto para tratar de limar asperezas ni conciliar. (como en el caso reciente) A mi por las buenas me han sabido convencer de cosas que ni me convienen solo por tener la decencia de pedírmelo suavemente y aclarar mis dudas.

Me da pena que haya gente tan pobre, que lo único que tiene es dinero en el bolsillo.

Por eso mis condiciones son inviolables de ahora en adelante. Con el único tipo de personas que mis condiciones tendrían conflictos es precisamente con el tipo de personas que no quiero tratar. Ya estoy muy grande para perder el tiempo y la verdad es que yo creo que la gente es muy linda y buena. Los patanes arrogantes no merecen mi tiempo (como en un caso reciente).

PEACE!